MI CONFRONTACIÓN CON LA DOCENCIA

Mi nombre es Blanca Estela Cárcamo Méndez, y después de leer y releer la lectura “”la aventura de ser maestro” recordé algunas anécdotas de cuando inicie mi propia aventura, esto gracias a la sencillez y claridad con que  José Esteve nos comparte su sentir y recorrido como maestro. Les comento que mi decisión por estudiar Psicología Educativa nació  cuando cursaba la educación media superior, pues una profesora que era orientadora educativa tenía esa profesión y me encantaba el trato, como se comunicaba y las recomendaciones de literatura que nos proponía para ser mejores seres humanos,  de ahí nació mi interés por esa profesión, y me permito reconocer lo afortunada que fui al encontrar en mi camino, como menciona Esteve, uno de los mejores regalos que los dioses tienen para cada uno de nosotros dentro de nuestro andar profesional “un maestro”. “A veces tenemos la fortuna de encontrar a alguien cuya palabra nos abre horizontes antes insospechados, nos enfrenta con nosotros mismos rompiendo las barreras de nuestras limitaciones; su discurso rescata pensamientos presentidos que no nos atrevíamos a formular, e inquietudes latentes que estallan con una nueva luz. Y, curiosamente, no nos sentimos humillados por seguir el curso de un pensamiento ajeno; por el contrario, su discurso nos libera y nos ensancha creando en nosotros un juicio paralelo con el que reestructuramos nuestra forma de ver la realidad; y luego, extinguida la palabra, aún encontramos los ecos que rebotan en nuestro interior obligándonos a ir más allá”, fue así como tuve en mente en el bachillerato ser psicología educativa, y si en éste momento tuviera que escoger una carrera que estudiar sería la misma. 

                                                 

Durante mi formación profesional trabajé desde el primer semestre, en una escuela de educación media superior, Cetís N.154, y cuando ingresé al cuarto semestre de la carrera inicie  mi aventura de ser maestro, sintiéndome de alguna manera como el profesor novato que menciona José M. Esteve: “el profesor novato se encuentra con que tiene claro el modelo de profesor ideal, pero no sabe cómo hacerlo realidad. Tiene claro lo que debería hacer en clase, pero no sabe cómo hacerlo. El profesor novato tiene que solucionar los problemas prácticos que implica entrar en una clase, cerrar la puerta y quedarse a solas con un grupo de alumnos.       

2 años después realice un cambio de plantel en el centro de la ciudad de México, me dieron  la oportunidad de estar al frente del departamento de Servicios escolares y continúe dando clases,  año y medio más tarde fui  nombrada jefe del departamento de Vinculación con el Sector Productivo por un año, nuevamente me reubicaron al departamento de Servicios Escolares, realice una maestría en docencia, me fui de licencia médica pues nació mi hija, antes de reincorporarme tramite nuevamente mi cambio de adscripción al plantel de origen y en agosto de 2006 me asignaron la oficina de orientación educativa y  dos grupos, dos años después, estuve al frente del departamento de Planeación y Evaluación por un año, y como estaba esperando a mi segundo hijo y ese departamento requiere de mucha dedicación en ambos turnos,  me reubicaron al frente del departamento de Vinculación con el Sector Productivo y continué dando clases hasta que me ausente por el nacimiento de mi segundo hijo.  Al reincorporarme me asignaron a una oficina del departamento de Planeación y Evaluación, formo parte del comité Construye T y sigo dando clases a 3 grupos de la especialidad de Administración, la asignatura de ciencia tecnología sociedad y valores I en el turno matutino.

Creo que ser profesor es una gran responsabilidad, pues no se puede asumir de manera irresponsable la función. Cuando se me notificó que iba a dar clases, me preocupé excesivamente pues era algo nuevo para mí,  recuerdo que un  compañero se acerco a mí y me comento que estaba enterado que sería mi primer día de clases, y que recordaba sus sentires cuando el tubo su primer experiencia frente a un grupo, y me dijo:   procura  llegar antes que los alumnos al salón, familiarízate con el espacio, no alces mucho el tono de voz, respira profundamente, espera que todos estén en su lugar,  posteriormente salúdalos, preséntate y permite que ellos también se presenten contigo y te sentirás mejor, y al llegar al salón recuerdo que ¡ya estaba repleto de alumnos!, y lo primero que hice fue respirar profundamente adentrarme al salón y comenzar ese gran día, lo que me hizo recordar  lo  que menciona Esteve  “en este aprendizaje por ensayo y error, uno de los peores caminos es el de querer responder al retrato robot del “profesor ideal”; quienes lo intentan descubren la ansiedad de comparar, cada día, las limitaciones de una persona de carne y hueso con el fantasma etéreo de un estereotipo ideal”., y pensé, que bueno que de alguna manera mi primer encuentro con la docencia no se dio como estaba planeado,  sino, probablemente me hubiera creado alguna adicción para saber que debía hacer al día siguiente y al siguiente y  hasta el día de hoy. Sin embargo, creo que, el respirar profundamente y escuchar que alguien más experimento ciertas sensaciones en sus inicios nos sirve a todos.

Respecto a la asignatura que imparto no está precisamente relacionada con mi profesión, pero  también es cierto que conozco teorías de aprendizaje,  cómo aprenden o no aprenden los alumnos, que es lo que caracteriza a los alumnos en esta etapa de su desarrollo,  además de que me gusta investigar lo que no sé,  o investigar sobre los temas que requiero aprender o reaprender; todo ello aunado a que para mí, es muy importante que los jóvenes tengan altas y claras expectativas de ser personas de provecho, responsables, honestas, que se superen día con día, que aspiren a tener un proyecto de vida, ya sea que al salir se incorporen al mercado  laboral o que continúen estudios superiores, que tengan una alta autoestima, que se respeten a sí mismos y respeten a los pares, y que reconozcan en mi a una profesora que los comprende, los respeta y se preocupa por ellos y en lo que puedo y esté relacionado con su educación y formación o desarrollo como persona, si se acercan a consultarme algún tema o problemática los pueda orientar, ya que  considero que existe una relación entre mi profesión y la docencia.

Los alumnos saben que soy psicóloga educativa, que no me gusta dar clase comunicándome a gritos y que el respeto entre todos es fundamental. Les gusta que les hable de algunos temas que van surgiendo de interés sobre la adolescencia. 

Actualmente estoy cursando la especialidad en línea titulada  “Competencias Docentes para la Educación Media Superior”, que brinda la Universidad Pedagógica Nacional, la cual me permite adquirir nuevos aprendizajes que enriquecen mi labor como docente y que con ayuda por ejemplo, de este blog, puedo conocer, identificarme y compartir con otros compañero docentes de lugares maravillosos de nuestro país, al igual que me permite nutrirme de aprendizajes de  mis estudiantes, pues hay que reconocer que ellos son unos verdaderos maestros en el uso de las tecnologías.

 Por último quisiera comentar que nuestras instituciones necesitan aportes importantes en la infraestructura y equipamiento, pues debido a los pocos recursos con los que se cuentan se tiene la dificultad de no poder apoyarnos de los medios electrónicos de la comunicación e interactivos, que favorecen la motivación, una mayor participación y atención de los alumnos.

BLANCA ESTELA CARCAMO MENDEZ